Ir al contenido principal

(In)olvidable recuerdo

Dirás que son solo recuerdos, momentos.
Son cómo imágenes que el tiempo oculta, no tienen vida propia pero le diste una oportunidad de formar parte de tu historia. Los recuerdos son parte de tu mente, tu memoria después de tantas cosas sigue fuerte recordando aquellos momentos intensos de tu vida: tu primer beso, tu primera caricia, tu primera vez... Testigo de tus primeras experiencias en la vida, como el empezar a tropezar y a levantarte de caídas con ayuda de los que tienes cerca y que nunca han dudado de ti, o incluso por iniciativa propia, ¿por qué no?


Pero van pasando los años y vas olvidando cosas - aunque también hay cosas que nunca se olvidan - sin embargo algunos innecesarios momentos del pasado se marchitan poco a poco, porque hay recuerdos malos que a veces hacen tocar fondo, tan profundos que te hacen pensar, recapacitar, comerte la cabeza o sumergirte en un mar que te quiere ahogar.

También sé que existen promesas que jamás se han cumplido. Promesas rotas, promesas que intentaste cumplir, y que las cumplieran, haciendo lo máximo para sentirte feliz. Pero ves que te pasas el tiempo discutiendo, llorando, y es entonces cuando tus promesas ya no sirven para nada.

Recuerdas tu primer fallo, tu primera cagada, todo se viene abajo y aún recuerdas el dolor, el rencor que llevas dentro, es entonces cuando recuerdas las discusiones tontas, por todo o por nada; recuerdas las típicas peleas con tu hermano, con tu prima o tu mejor amiga. Intentas medio borrar los recuerdos de los amigos del colegio que se fueron si decirte nada.

A pesar de todo, supongo y espero que habrá un lugar donde permanecerán y seguirán, que estarán ahí siempre, porque me niego a que algunas cosas desaparezcan en el olvido de por vida por despiste o momentos de encabronamiento.


Comentarios

  1. Recuerdos

    RECUERDOS

    Con el paso del tiempo las imágenes que retuvieron nuestras retinas pierden su contorno, se diluyen entre sombras haciéndose cada vez más borrosas. Y uno se esfuerza revisando su pasado, tratando de rescatar esas imágenes que grabó con frescura. Y con empeño solo reúne una distorsión de líneas, formas y destellos, trazos de figuras refugiadas en la mente en espera de que la memoria acierte a recuperar y ordenar.

    Son brumas de recuerdos que se desfiguran y se configuran en distorsionado antojo. Esas reminiscencias de experiencias han ido marcando una vida y resisten a perderse colgadas en el presente en vagas y selectas pinceladas decoloradas. Montan frágiles siluetas del pretérito supervivientes en nosotros sensibles y tiernas acumulando velos de niebla que las difuminan poco a poco más hasta confundirlas con la ausencia, hasta converger en metáforas de la luz.

    Finalmente, transformadas en informes nubes volarán allá, allá lejos, hacia la región donde habita el olvido pendientes de un gélido soplo que algún día las borre definitivamente.

    (yo también te leo)
    http://silavesdilehola.blogspot.com.es/2014/07/recuerdos.html

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

¿Por qué ser feliz?

Tener o no tener, hacer o no hacer, saber o no saber. Siempre tenemos algún motivo para tener, hacer o saber lo que queremos, por mucho que pensemos que no.  Muchas veces he creído no tenerlo, pero siempre he tenido a ciertas personas que me dan una razón por la que ser yo, un motivo por el cual no cambiar. Muchas veces pensé que gente que ahora no está sí que estaría, pero la verdad es que no me arrepiento de qué se hayan ido ya que soy feliz con lo que tengo y no necesito a aquella gente por la que he pasado mil historias. ¿Por qué ser feliz? No solamente por mí, sino por la gente que tengo a mí alrededor, porque quiero poder sacar una sonrisa a la gente que me importa. Desde hace un tiempo he hecho mil cosas mal y otras mil peor, y todo por no saber que quiero, supongo que ahora si lo sé y porque, y también supongo que aquellos errores sirven para ahora. Por una parte querría que todo aquello no tuviera un sentido en mi vida, ya que miro hacia atrás y solo veo negro. Recu

El amor en épocas turbias

Las expectativas duelen, hacen daño. La falta de ellas, sanan y te dejan vivir. Os lo digo yo que desde que decidí no ponérmelas, he encontrado hasta el amor. El amor hacia mi propia persona, el amor hacia lo más simple, el amor hacia un día a día, el amor hacia quien lo merece, el amor hacia lo común, el amor hacia, incluso, lo que jode. El amor. En general.  Estamos acostumbrados a vivir pensando que el amor está aprendido, como si hubiese nacido en nosotros de forma innata. Un amor dormido que se despierta cuando alguna situación de nuestra vida le activa la alarma. Es por ello que cada persona tiene su propio concepto del amor, su propia simbiosis, su propia relación y su propia manera de vivirlo. Cada uno pone límites y fronteras, hay quienes se las quitan. Pero, ¿sabéis algo importante? Desde pequeños nos dicen que no siempre te vas a poder dedicar a lo que más te gusta, o al menos al principio de tu trayectoria laboral, y a veces no les falta razón. Lo mismo pasa con el

Sólo quedan palabras

Cuida a aquellas personas que estuvieron ahí desde el principio, ofreciéndote lo mejor de si y sin pedir ni esperar nada a cambio para que cuando los cuatro de ahora se cansen, te hayan sacado todo y se vayan, sigas teniendo a los que de verdad les importas.  No te dejes llevar por el primer piropo que te lancen, al fin y a cabo las palabras se las lleva el viento y lo que importa son los actos. No les pierdas, ya que cuando todos te abandonen los únicos que quedarán serán ellos, los del principio, y si les pierdes será demasiado tarde para buscarles. "Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde" , por eso mismo, conócelo antes de arrepentirte de no tenerles.